miércoles, 26 de enero de 2011

Paul Evans (Nueva York, 1938)

Nacido en el barrio neoyorquino de Queens, la familia de Paul estaba enteramente dedicada a la música ya que tanto su hermana como su madre tocaban el piano profesionalmente y otra hermana interpretaba canciones populares a la guitarra. Su padre, que tocaba la flauta, la vendió para comprarle la primera guitarra a Paul y su hermana le enseñó a tocarla. Durante su adolescencia se decantó por el country & western y otras músicas folclóricas del país, deleitando a sus compañeros ya en las actuaciones del instituto. Tenía talento y desparpajo por lo que pronto consiguió un programa de radio propio en una emisora local de corto alcance. Empezó a decantarse por el rock and roll nada más empezar a estudiar ingeniería, por lo que dejó la carrera para empezar a tocar en el duro circuito de clubs, por fortuna consiguió un contrato para actuar como cantante fijo en un crucero, trabajo mejor remunerado y más cómodo y seguro. La música que surgió de estas experiencias fue un rock & roll limpio aunque rápido, de gran calidad compositiva y adaptado a todos los públicos, que anticipaba la llegada del high school de los teen-idols poco tiempo después. Se presentaba en las casa de agentes musicales sin avisar, con su maqueta y su guitarra bajo el brazo para que le escucharan, y así en casa de uno de ellos, mientras jugaba al poker con sus amigos, le escucharon y les gustó (aunque se preguntaban que música era esa. El más listo de ellos dijo, mientras ganaba la mano y en tono despectivo: "Rockabilly"), vendiéndole a los de RCA. Estos le editaron rapidamente el magnífico single de debut "What do you know?" (1957) que sin embargo pasó bastante desapercibido. No así su composición "When", que vendida a los Kalin Twins se convirtió número uno de las listas, pero como la multinacional estaba ocupada en otros proyectos más ambiciosos (lease Elvis) Evans marchó, después de un par de discos más, al sello Decca, entonces el más prometedor en cuanto a nuevos lanzamientos de rock, desde donde su "I think about you all the time" (1958) fue un tremendo éxito en Canadá, aunque los productores no se lo comunicaron. Este feo, la falta de paga y las duras condicoiones que le imponían en las giras (con gente como Los Crests y Santo & Johnny, incluso a las Filipinas) hicieron que Paul dejase la empresa y se uniese a un grupo llamado Los Curls, que hacían una especie de doo-wop rockeril. A la vez consiguió colocar algunas de sus composiciones a otros artistas con bastante éxito (Carl Dobkins Jr. practicamente vivía de él), aunque su tema más conocido de esos días fuese, "Seven little girls (sitting in the back seat)" (1959), que ya sobrepasaba los límites del más edulcorado high school para caer en la baboseria más chocante y tonta y que le llevó a actuaciones televisivas todavía más grotescas, una de ellas compartiendo escenario con un chimpance. Por suerte, aparte de sus necesidades comerciales, Evans conservaba su inmenso talento intacto y, aparte del disco más rockero "Happy-go-lucky-me", mientras estaba de gira con la Bobby Comstock Band, arregló una vieja canción popular hasta convertirla en una de las grandes obras maestras del rock & roll, "Midnite Special" (1960), que luego le versionearon con más éxito los Creedence Clearwater Revival. Siguieron otras canciones sensacionales, divertidas y rockeras que merecían mucha mejor suerte comercial, pero que al menos dieron como resultado un álbum inolvidable. Curiosamente ahora, no sabemos si por llevar la contraria, Evans, que había sido pionero en el sonido high school, se decantaba por el rock & roll clásico cuando las tornas habían cambiado. Este gusto por ir a contracorriente, aunque le gana nuestro aprecio, le costó el olvido musical en su país y tuvo que fichar por una discográfica inglesa, país a donde se había desplazado el meollo del mundo rocker más auténtico. Poco después trato de hallar un termino medio, creando grandes melodías un poco al estilo del último Buddy Holly, como "After the hurricane" (1961) y fichó de nuevo por sellos norteamericanos. Buena persona e inteligente, su canción "Passing throught" fue muy criticada por esas malas personas que hay en su país (que son siempre los mismos, pero son muchos y pueden votar y todo) porque decía, en los momentos más tensos de la guerra fria, "yanqui, ruso, blanco o negro un hombre es un hombre". Su adscripción al pacifismo y a las buenas obras no conllevó un cambio musical al folk, sino que siguió apegado al rock y al country con una fidelidad asombrosa para los tiempos que corrían. Evans, además, fue pionero en tocar en cárceles para animar a los presos, cosa que luego popularizaría Johnny Cash entre otros, pero que Evans ya registró de forma brillante en su LP "21 years in a Tennesse jail" en una fecha tan temprana como 1964. Como el gran éxito no le sonreía se volcó más en su carrera de compoisitor para otros artistas, pues al fin y al cabo era lo que le daba más royalties. Así colocó temas a grandes como Jackie Wilson, LaVern Baker, Frankie Lymon, Fabian, Los Coasters, Pat Boone (al que influyó en su estilo) y al mismísimo Elvis ("I gotta know", por ejemplo), aunque su mayor éxito en este campo fue su tema "Roses are red, my love", que grabó con tremendo éxito Bobby Vinton. . Tambíen se dedicó a la realización de cuñas musicales para radio y televisión, algunas de las cuales editó como disco a su vuelta a los escenarios en los primeros años 70, pero ahora actuando bajo el pseudónimo de Eli Whitney. Sabiendo de su potencial a pesar de los años transcurridos y decidido a trinfar, recuperó su verdadero nombre y consiguió un tremendo y sorprendente éxito mundial con su canción de country-folk-pop "Hello, this is Joannie" (1978), que fue número uno de las listas country de las grandes ciudades estadounidenses y número 6 total en Gran Bretaña. Era un tema algo alejado de los parámetros del rock & roll pero bastante digno y que le valió otro contrato en Inglaterra. Por desgracia los años 80 fueron malos para él, con problemas familiares incluidos, y se refugió en la producción y composición alejado de los escenarios. Con la proliferación de festivales de rockabilly en los años 90, Evans reclamó su puesto en ellos sin ningún recato en su álbum de reivindicativo título "I was part of the 50´s" (1998), es decir, "Yo fui parte de los 50", algo que el gran público ya había empezado a saber desde que algún tema suyo apareciera en famosas bandas sonoras de películas como "Uno de los nuestros" o "Poderosa Afrodita". Actualmente esta a vuestra disposición y bastante en forma para cualquier festival, a ver si lo traeis.
Músicos: Paul Evans (voz y guitarra), Buddy Saltzman (batería), The Curls, The Rocky Mount Ramblers y The Brass Band.


"Midnite Special".

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