martes, 30 de junio de 2009

Tennessee Ernie Ford (Bristol, 1919 - Reston, 1991)

Inclasificable fenómeno de la música, inquieto artista que supo tocar todos los grandes géneros de los primeros 60 años del siglo XX sin adscribirse a ninguno y haciéndolos todos bien, Ernie Ford fue uno de aquellos grandes que fueron abriendo el camino al rock and roll y lo rozaron tangencialmente. Nació en un pueblo del sureño estado norteamericano de Tennessee y siendo aun casi un adolescente se puso a trabajar de locutor en la emisora de radio local. Enamorado de lo que oía allí y decidido a saber de lo que estaba hablando, dejó el programa a los 20 años para estudiar música clásica y canto en el conservatorio de Cincinati. Al completar sus estudios se alisto en las fuerzas aereas para combatir en la Segunda Guerra Mundial y allí destacó de tal manera en los cazabombarderos que castigaban Japón que pronto ascendió a teniente (esperemos que entre sus méritos no estuviera el ser uno de los criminales de guerra que lanzaron las bombas atómicas). Al terminar el conflicto Ford marchó a California a recomenzar su carrera en la radio y fue contratado como pincha-discos en una emisora country de San Bernardino. Allí creó su personaje de Tennessee Ernie (mejor el pseudónimo, asi no lo confundimos con Ernie Ford, a secas), un chiflado paleto sureño, un salvaje de personalidad tan desbordante que tuvo en seguida un gran éxito, siendo fichado por una emisora más importante en Pasadena lo que le hizo muy popular en todo el estado. Por ello se le contrató como presentador de algunos conciertos en los cuales él mismo cantaba canciones de country, hillbilly o bluegrass acompañado de grupos como los Wayfield Brothers o la Cliffie Stone Band. Estos espectáculos tuvieron tan buena acogida que pronto saltaron a otros estados a finales de los años 40, ampliando la fama de Ford por todo el país. Llamó la atención de discos Capitol que le fichó, editándole unos maravillosos singles de música country como "Mule train" (1949), un número uno en las listas del género, swing y boogie woogie que le reportaron en seguida fama nacional. Son temas como -tras el soso dueto con la cannte Kay Starr "I´ll never be free", número dos en las listas country- "Shotgun boogie" (1950), número uno en esas mismas listas, "Kissin´ bug boogie" (1951), "Blackberry boogie" (1952) o "Catfish boogie" (1953), verdaderos antecedentes del rock and roll. Aunque se tomó un pequeño descanso de una fama repentina que le agobiaba, Tennesse volvió a la televisión, ahora nacional, para ser el director de orquesta en un popular programa musical de la cadena NBC en 1954 y, enlazándolo, interpretar el papel de Tio Ernie en la famosa serie de la tele (famosa allí, vamos) "I love Lucy", protagonizada por Lucy Ball. Aqui Ernie retomó un poco su papel de paleto sureño, aunque sin exagerarlo tanto, y se hizo una cara muy querida y carísmatica en todo Estados Unidos. Aun así su gran momento llegó al versionear el lamento minero de Merle Travis "Sixteen tons" (1955), convirtiéndolo en una armonía vocal cercana al doo-woop y al rock and roll (preparándolo para posteriores versiones como la de Los Platters) y aupándolo al número uno de las listas totales. Convertido ya en uno de los mas grandes artistas de Estados Unidos, consiguió su propio programa de televisión, The Ford Show, que, muy oportunamente, se llamaba así porque lo patrocinaban los coches Ford. Fue muy popular y polémico pues a pesar de incluir todo tipo de música, soul, baladas crooners, estilo Broadway, e incluso cantó allí algun proto-rockabilly propio como "Rock and roll boogie" (1956), el programa Ernie terminaba siempre con un gospel o un himno religioso, lo cual parecía una provocación a los amargados de siempre. No era tal, Ernie también amaba el gospel y ya había editado un álbum con ese tipo de música y aun ganaría Grammys con otros posteriores. En esta época Ford se relacionaba con lo más granado de la sociedad, pero también con lo más pútrido, incluido Jack Ruby, el tipo que mató a Lee Harvey Oswald (ya sabeís, al que le cargaron el muerto -nunca mejor dicho- de liquidar a Kennedy) y, de fiesta en fiesta empezó a tener serios problemas con el alcohol (su gusto por el whisky Cutty Sark no era nada comparado a como le pegaba su mujer Betty, no solo a la bebida sino también a los estupefacientes) . Quizá por eso buscaron un poco de tranquilidad, dejando el programa en 1961 y comprando una aislada cabaña en Idaho donde Ernie podía retirarse a pintar. Pero también tenía que trabajar y lo hizo en su propio programa de televisión en California de 1962 a 1965, lugar donde, si, ganó dinero, pero donde también volvieron los viejos fantasmas del alcoholismo y la drogadicción. Tras la relativa repercusión de "Come on down" (1975), este consumo excesivo había afectado a su voz y ya apenas podía cantar por lo que dejó prácticamente de grabar y los contratos importantes cesaron. Ernie se dedicó a grabar anuncios publicitarios y a convertirse en algo así como un presentador oficial de las Fuerzas Aereas que, a estas alturas (otro buen juego de palabras, ¿eh?) ya le había ascendido a Coronel. Pero la pareja seguía colocándose sin control y Betty murió de una sobredosis en 1989. Ernie quedó hecho polvo pero eso no fue obstáculo para casarse solo 4 meses después. Tampoco para ir a cenar con el presidente Bush padre (seguramente su cerebro también estaba regular), saliendo de la Casa Blanca con le hígado destrozado, aún sin que nadie haya explicado porqué Bush querría envenenarle. Murió como consecuencia de ello solo 15 días después de la fatídica cena, reuniéndose con su querida Betty cuando tenía 72 años se edad.
Músicos: Tennessee Ernie Ford (voz), Jimmy Bryant (guitarra), Speedy West (steel guitar) y las Hometown Jamboree y Kay Kyser´s Bandsy The Starlighters y The Dinning Sisters.

"Sixteen tons".

No hay comentarios: