"¿Esta vivo Elvis?" (Gail Brewer-Giorgio, 1988)

Todos los grandes ídolos populares que murieron de forma más o menos inesperada (Rodolfo Valentino, Carlos Gardel, Hitler...) tienen una legión de incondicionales que se niegan a afrontar el deceso y los situán en paradisiacos lugares alojados del mundo. Elvis no iba a ser menos y se cuentan por centenares las personas que dicen haberle visto despues de muerto y millones los que creen que el Rey del rock sigue vivito y coleando. Este oportunista libro (que en su primera y corta edición se llamaba "La más incréible historia sobre Elvis jamás contada") mantiene la teoría de que Elvis, harto de no poder llevar una vida normal (la verdad es que le gustaba escaparse disfrazado, solía hacerse el muerto, era un fan de la doble personalidad que llevaba el Capitán Marvel Jr. de los comics y estaba harto de ser Elvis Presley) fingió su propia muerte y se marchó a su propia shangri-la, quizá en Sudamérica o en Hawaii. Es cierto que hay una serie de circunstancias extrañas que precedieron y siguieron a la muerte de Elvis y ello da pie a esta escritora para elucubrar sobre lo que sucedió. Elvis estuvo ocupadísimo los últimos dias de su vida: Se dedicó a visitar frecuentemente la funeraría de Memphis, renovó su seguro de vida, recibió un millón de dólares por un futuro especial de televisión (a pesar de que estaba gordo y nunca hubiera consentido mostrarse así), despidió plantilla, hizo testamento, vendió multitud de cosas (entre ellas su rancho) y sin embargo, aunque tenía que salir de gira el 16 de agosto (fecha de su muerte) no encargó nuevos trajes, ni envió a Lisa Marie con su madre, ni se tintó el pelo de negro azabache (cosas que siempre hacía). Nada más enterarse de su muerte, el Coronel Parker, su manager de toda la vida, no voló corriendo a Memphis sino que se fue a firmar unos suculentos contratos para promocionar productos del artista (de los cuales ya había preparados millones): Elvis ganaría muchísimo más dinero despues de su muerte que en vida. En el inventario de las cosas de Elvis que se hizo, muchas de las cuales se exponen en su museo, faltan sus objetos más personales tales como algunas joyas características y sus libros preferidos de los que jamás se separaba. Tal vez se los llevó con él. El 17 de agosto, al dia siguiente de su muerte, un hombre igualito a él que se llamaba John Burrows tomó el primer vuelo que salía de Memphis con destino a sudamerica, John Burrows era el nombre falso (con documentación incluida) que los servicios secretos yanquis dieron a Elvis como agente honorario (quizá no hizo falta ni eso, el Coronel Parker era un redomado falsificador). Mientras tanto su cuerpo era expuesto en un sepulcro que pesaba más de 400 kilos para que las largas colas de curiosos pudieran rendirle pleitesía por última vez (excepto los más incondicionales, que fueron invitados a no asistir). Muchos de los allí presentes dijeron que no era él, que no tenía esa nariz. que más bien parecía un muñeco de cera (los 400 kilos del sepulcro contendrían un aparato de aire acondicionado para evitar que la cera se derritiese con el sofocante calor de aquel dia). El nombre en su tumba está mal escrito ("Elvis Aaron" en vez de "Aron") lo cual resulta increible pues para Elvis y sus familiares esta ortografía fue algo casi sagrado ya que significa una especie de atadura rítmica sobrenatural con su hermano gemelo fallecido Jessie Garon. Elvis, que era supersticioso, no habría querido escribir su verdadero nombre en su falsa lápida para no tentar a la suerte. Por si esto fuera poco, pocas semanas despues de su muerte fueron arrestados dos hombres que pretendían profanar la tumba de Elvis en Forest Hill, para demostrar que no había muerto y que la tumba estaba vacia. Vernon, el padre de Elvis, no presentó cargos pero trasladó el cuerpo al interior de la superprotegida mansión Graceland (no poniendolo al lado del de la querida madre de Elvis, como el Rey siempre quiso) quizá temeroso de nuevos intentos y para evitar exhumaciones o posibles autopsias posteriores. En 1979 surgió un cantante llamado Orion que cantaba como Elvis, vestía como Elvis y tenía la complexión de Elvis pero se cubría con una máscara. Orion no era Elvis, era el magnífico imitador Jimmy Ellis, pero se comprobó que Orion actuó en dos ciudades al mismo tiempo por lo que podría ser la tapadera perfecta para que Elvis saciase su mono de actuar de vez en cuando. Hacia 1981 un radioyente que se identificaba como Sivle (Elvis al reves, por cierto "lives" -vive- también se forma con las letras de Elvis) empezó a llamar a distintas emisoras y tenía una voz idéntica a la del rey (Presley solía hacer las reservas del estudio de grabación a nombre de Sivle). En 1987 apareció -y desapareció con la misma rapidez- otro misterioso cantante llamado Steven Silver ("silver", de nuevo las letras que conforman Elvis) que suena exactamente igual que Presley, y sacó un single titulado "Down in Mississippi" que narra una historia similar a la de Presley... que termina con él huyendo de la fama. En la actualidad el único sitio donde no se puede entrar, ni siquiera para limpiar, en Graceland es la suite donde Elvis murió. Los recuerdos de Priscilla del dia de la muerte de su ex-marido la verdad es que aportan más sombras que luz a todo este embrollo. El libro incluye una presunta grabación de Elvis despues de muerto en la que dice que adelgazó, se dejó barba, estuvo en Europa un tiempo y estaba empezando a componer. Creo que todos estos asuntos tan sospechosos tienen una explicación que no sea que Elvis fingió su muerte para llevar una vida más apacible y pienso que las contradicciones sobre esta gigantesca conspiración son muchas, pero tambié creo que la familia Presley sobreviviente (Priscilla y Lisa Marie) deberían dar algunas explicaciones sobre algunos puntos oscuros, precisamente para atajar las habladurias y también por tener un detalle con los fans Esas dos locas, millonarias a nuestra costa, nos lo deben. De todas formas este libro, aunque interesante en cuanto a algunos detalles sobre la vida y muerte del Rey, pierde gran parte de su credibilidad si nos fijamos en que realmente no es más que un larguísimo panfleto publicitario para promocionar su novela "Orion", la cual trata sobre un exitoso cantante que finge su propia muerte, con ayuda de su manager, para huir de la fama (Al parecer el mismísimo Coronel Parker habría estado boicoteando su publicación). Pero la autora aun se hace más sospechosa al enterarnos que también es manager de música country (¿Quería llevar la carrera del malogrado Orion? -vease entrada sobre él-) y que se cree con poderes sobrenaturales para descubrir complicadas tramas judeo-masónicas. Desde entonces ha aprovechado el tirón y ha escrito otros tres libros sobre este tema. El caso es que da lo mismo, ya sea en Hawaii o en nuestros corazones ELVIS VIVE.

Un bonito y emocionante video que va más allá aun en esta cuestión: ¿Murió realmente Jesse Garon?